sábado, 26 de septiembre de 2009

Un momento, una persona, un recuerdo, una pregunta, una imagen


Lunes

1: Solo viajando en bus ve uno cosas así

El bus de Curri se iba llenando cada vez más, la gente comenzó a hacer fila de pie, tomándose de las barras.

-¡Diay! ¿Compró los dos asientos? –le gritó desde atrás del bus una mujer a otra, que iba sentada en los asientos delanteros, con una gran bolsa sentada como única acompañante.

Lo que vino a continuación fue un intercambio de respuestas, algo así:

-¿A usted qué le importa? Yo lo pago si quiero. Si quiere pleito para eso está la calle.

-Pobrecita, está muy viejita, sería como pegarle a mi mamá.

Y así varias veces, mientras el chofer y los demás pasajeros solo atinábamos a mirarnos con cara de incredulidad, ese morbo por lo ajeno y algunas sonrisas algo burlonas por la escena. Al final creo que no pasó a más el asunto, pero no estoy seguro, porque el bus llegó a mi parada.

Martes

2: Dos años sin abuelo

Don Álvaro se nos fue una mañana de sábado. Este martes 22 son ya dos años y de repente me doy cuenta de lo rápido que pasa el tiempo.

La última vez que hablamos fue la noche del sábado anterior a su muerte. Recuerdo que en ese entonces cruce los pocos metros que separan su casa de la de mis papás con un nudo en la garganta, supongo que era el lógico resultado de haber tenido una conversación extraña, con algunas risas consecuencia de sus clásicas salidas, esa vez salpicadas por momentos de incoherencias propias de su condición de aquel momento. Al día siguiente, cuando pasé a despedirme para viajar a San José lo encontré dormido, y me quedé unos minutos en el marco de la puerta viéndolo respirar con dificultad, temiendo (y sabiendo en el fondo) que no conversaría ya más con él.

Incluso aún ahora, cuando llego a visitar a mis tías a su casa, inconcientemente entro al cuarto de mi abuelo como para saludarlo, sentarme a leer el periódico y comentarlo a medias con él; pero pocos metros antes de entrar me percato de que ya llevamos mucho tiempo sin tenerlo con nosotros. ¡Cómo pasa el tiempo!

Jueves

3: Nino

En mi primer trabajo en una agencia de publicidad hice muchos amigos. Pero definitivamente a los que recuerdo con mayor estima es a los mejengueros, Beto, Tavo, Monry, Walter y alguno que otro invitado adicional. Trabajábamos en un edificio frente a la Sabana, por eso solo teníamos que cruzar la pista para comenzar un partidito de mediodía y, como siempre nos faltaba uno, Beto invitaba a Nino, su hijo de diez u once años. A Nino se le notaba que lo suyo iba a ser el fútbol, cada vez que llegaba  a la agencia lo hacía con una bola bajo el brazo y en los pies, era como Oliver Atom cuando decía “el balón es mi amigo”.

Siete años después abro el facebook como cualquier otro día y encuentro que Beto ha posteado la foto de un joven jugador del Club Sport Herediano –un debutante- corriendo con el balón en pleno partido de primera división. Al principio me extraña, porque hasta donde recuerdo Beto era bastante Saprissista, pero entonces algo me sacude los recuerdos, me hace ver la foto con detalle y en la cara del joven herediano encuentro los rasgos del chiquillo con el que yo compartía las mejengas hace ya tantos años y no pude más que sonreír con alegría ajena al ver a Nino convertido en futbolista profesional.

4: Flash Forward

Esta nueva serie se centra en Mark Benford (Joseph Fiennes), un agente del FBI que cae inconciente en medio de una persecución policial de autos en las calles de Los Ángeles. Cuando despierta, lo hace en medio de un desastre global y descubre que el mundo entero estuvo inconciente al mismo tiempo, durante 2 minutos y 17 segundos. El punto importante es que Mark y todos los demás en el mundo no solamente se desvanecieron, sino que durante ese lapso de tiempo tuvieron una visión de cómo será su propia vida al cabo de 6 meses, en la fecha del 29 de abril de 2010.

La que es considerada casi por unanimidad como la serie de televisión encargada de heredar a los fans de “LOST” (cuando esta termine en mayo de 2010), “Flash Forward” resulta ser algo nuevo e intrigante, no solo por sus técnicas narrativas y el desarrollo de sus personajes, sino también por la cuestión filosófica que encierra, varias preguntas interesantes incluyendo la de si estamos regidos por un destino predeterminado o simplemente por la causalidad de las cosas y de nuestros actos. En definitiva algo para tener en cuenta, veremos cómo avanza

Viernes

5: Envidia de la buena

Creo que hay pocas cosas tan buenas para el desarrollo personal como sentir envidia de la buena, de esa que te impulsa a volver a tus proyectos y tratar d mejorarlos y llevarlos a un mejor nivel. Personalmente me pasa cuando encuentro una idea poderosa detrás de un gran comercial publicitario, un libro que al terminar me deja nostálgico y queriendo leer más, una película que me cuestiona cosas o un cómic que resulta ser más profundo de lo que pensaba. Todo esto porque uno siempre sueña con hacer ese próximo gran comercial o contar la siguiente historia que resuene exitosamente en la gente. 

Hoy me pasó con la fotografía: 

www.smashingmagazine.com/2009/09/25/beautiful-examples-of-kinetic-photography/

 

 

1 comentario:

werner matarrita dijo...

No es lindo andar es bus, por que, al chile no lo es, pero de que es una experiencia antropológica, lo es. Solo allí se ven cosas más increíbles que las que Walt Disney hubiera imaginado, ja, ja, ja. Qué kul Monri, las pocas veces que he compartido con él, me parece estupendo. Y dice Nati, que recién vio a Beto con el pequeño hijo de tus recuerdos, que éste ahora es un hombre más grande que vos y que yo juntos, ja, ja. Si me permitís lo que más me impresionó esta semana fue que un padre sea capaz de matar a sus dos hijos. ¡Eso sí que me impresionó mucho, muchísimo! Buen blog, no parés.