domingo, 31 de enero de 2010

Argumento esfumado

Ayer iba cabeceando en el bus camino a San José.

Lo bueno... es que en uno de tantos cabezazos tuve una especie de sueño en el que se me ocurrió el argumento de una historia que me pareció en el momento muy original e interesante.

Lo malo... es que de repente sentí que me estaba despertando y que con ello se esfumaba la idea y aunque traté de aferrarme a esta, al abrir los ojos la había olvidado por completo. Todavía hoy estoy tratando de recordar de qué se trataba, sin éxito.

Lo feo... obviamente estar con la incertidumbre sobre qué trataba la historia.

Lo curioso... puedo jurar que el bus avanzó escasos 10 metros nada más en ese periodo interno que sentí como un largo sueño.
Cosa más rara!

miércoles, 20 de enero de 2010

La moto de Kaneda

El pasado sábado terminé de hacerme los regalos de la época de fin y principio de año... 
¡Ya tengo la moto de Kaneda! (De la película animada "AKIRA").

Eso sí, fue hasta anoche a eso de las 11 p.m. que abrí la caja y la terminé de armar. Lo vacilón fue sorprenderme poniendo cara de menso o de carajillo ilusionado mientras terminaba de pegarle las piezas finales. 
Quizás es una vagancia o una güilada, pero definitivamente siempre he dicho que uno no debería "hacerse grande" nunca.

martes, 19 de enero de 2010

"Paraíso propio" (fragmento)

Una delgada capa de césped aquí y allá apenas insinuaba su brotar por entre algunas grietas del camino de tierra seca por donde él trotaba. A menos de un metro de cada lado las delgadas ramas parecían intentar detener su avance sin mucho afán, lo que más bien parecía una tonta excusa para tocar su blanco pelaje.

El bosque era nuevo para él, sin embargo había algo que lo hacía sentirse seguro, incluso una calidez similar a la alegría llenaba su corazón durante algunos lapsos de tiempo y era entonces cuando más disfrutaba del lugar, disminuía la velocidad de sus pasos para mirar hacia arriba y simplemente dejarse atrapar por tanto verde y tantos pequeños sonidos. Cada vez que el ruido de sus pasos dejaba de llenar el aire podía descubrir nuevas cosas, así que se detuvo un momento. Inmediatamente le llegó un dulce olor a néctar y supo que, oculto en lo más alto del follaje brotaban las flores que lo producían y también que sería inútil tratar de avistarlas desde el suelo. Unos segundos después el breve canto de algún pájaro desconocido llegó a sus orejas, mentalmente unió ambos sentidos y de repente estaba viendo en su cabeza la imagen de una exótica flor que abría sus alas y volaba hacia su libertad; la idea le hizo emocionarse y sacudió su cuello en señal de alegría, haciendo que su crin bailoteara un poco con la brisa fresca del lugar. Momentos como esos era los que más disfrutaba, cuando su cerebro le hacía soñar cosas aún estando despierto.

Caminó algunos metros, contemplando un paisaje que le hacía recordar la tierra en la que había nacido, un lugar lejano donde había coleccionado recuerdos de momentos felices, cuando era más joven, cuando el cuerno de su frente apenas comenzaba a formarse. Encontró un árbol de manzanas y comió unas cuantas antes de sentir la necesidad de continuar su trayecto. 

sábado, 9 de enero de 2010

Volver al fút... a las mejengas!

Uno de mis propósitos del 2010 es hacer ejercicio de manera más continua, por eso hoy vencí la modorra normal de los sábados en la mañana para desayunar como la gente y estar en San Pedro a las once de la mañana, me esperaba el fútbol 5 con los compas.
A pesar de que esta mejenga, y la de los martes en la noche, son costumbres fijas entre los más asiduos, tengo que confesar que no he ido tan regularmente como debería; los martes por la distancia desde mi trabajo y los sábados por motivos varios. Cuando terminó mi curso de inglés logré ir varios sábados seguidos y comencé a tomar nuevamente el ritmo de jugar, pero por ahí de octubre comenzaron los ataques de pereza, eso sí, con la complicidad del sueño atrasado y el cansancio acumulado... entre todos me amarraban al aparta cada mañana de sábado desde entonces.
Hoy rompí la mala costumbre y me encaminé a ver a los compas, para compartir un rato de patadas, habladas, carcajadas (decir risas se quedaría corto) y tonteras de maes. Es curioso, la gran mayoría somos gente de publicidad que hemos ido tomando este rato para ponernos al día de dónde estamos trabajando y cómo nos está yendo, cómo está el ambiente de las agencias y el freelance en general... es, en sí una gran excusa para disfrutar un rato. Es más que solo mejenguear, sin querer nos hemos creado un espacio de ocio y entretenimiento, que de paso le hace bien a la salud de todos. Ya son varios años de esto y el grupo se ha ampliado, ya sea con otros compas del medio o con amigos de amigos, que terminan siendo parte de la pelota de gente.
Este año (como ya lo mencioné) pretendo terminar en mejor condición física que el año pasado y hoy comencé haciéndolo bien, lo cual motiva para seguir poniéndole. Y es que tengo que aprovechar todas las ventajas de la mejenga, porque correr solo me da mucha pereza (más que levantarme temprano un sábado) y en el gimnasio la verdad no tuve buenas experiencias durante el año que estuve; es un hecho, me cuesta demasiado ganar peso y siento que perdí más de lo que gané estando en uno.
Lo importante de hoy fue que, a pesar de tener unos tres o cuatro meses sin jugar, no me fue nada mal, como quizás esperaba; me falta un poco el aire y me sigo sintiendo lento comparado con mejores tiempos pero es algo normal en alguien que ha perdido la costumbre de cualquier rutina de ejercicios. Es cuestión de constancia, ¡el propósito ya entró en acción!





domingo, 3 de enero de 2010

Este 2010

Como todo el mundo, pretendo terminar este año 2010 siendo una mejor persona de la que soy hoy, como hijo, hermano, amigo y profesional; pero estos son propósitos que deberían ser básicos para cada persona ahora que inicia el año. Sin embargo, hay algunas cosas que quiero perseguir con especial interés:

1. Estar más pendiente y cerca de la gente que quiero. Si de algo me di cuenta este fin de año es que no sabemos hasta cuando van a estar a nuestro lado.
2. Hacer ejercicio de forma más constante. Definitivamente tengo que terminar este 2010 en mejor condición física que como terminé el 2009.
3. Trabajar para consolidar a Cactustus como una tira cómica más entretenida, ampliar su presencia a otros medios y lograr que la siga y le guste a más gente.
4. Conocer 15 nuevos lugares de Costa Rica. El año pasado lo intenté con nombres y todo pero no lo logré, así que esta vez no me importa el lugar, lo que vale es que no haya estado nunca antes allí.
5. Terminar la novela en la que he estado trabajando (ya falta poco) y escribir al menos 10 cuentos más, incluyendo ojalá un cortito para cine.

Además, hacerme exámenes físicos generales, donar sangre y sembrar (al menos) un árbol; propósitos que he postergado durante muchos meses ya. Ah, y hay otra cosa de la que me di cuenta al revisar la agenda 2009: tengo demasiadas veces las palabras "Cancelada" o "No fui" junto a reuniones, eventos, salidas y otras actividades que había agendado, pretendo evitar hasta donde pueda que eso pase este 2010.

¡A ponerle entonces! ¡Y feliz año a todos!